lunes, 20 de octubre de 2008

Enamorarse

Cuando uno se enamora idealiza hasta el aire que pasa por su lado. Todo lo que él o ella puedan hacer es algo maravilloso que nunca vimos, que es diferente, que huele y late distinto al resto de la humanidad.
El enamoramiento nos pone la piel sensible, el llanto alerta, la risa inevitable, nos trastona el apetito, nos pone mariposas en el estómago y los ojos, ¡ ah, los ojos!, por ahí se nos ve el alma y el amor se nos escapa a raudales.
El enamorado/ a,siempre,de una forma u tra recurre a las palabras. El romanticismo nutrió de palabras un período importante en la historia de las letras. Pero, la verdad es que hasta existe un número de sms para comprar rimas o poemas a la hora de susurrar en los oidos de la persona amada.
Es que las palabras pueden enamorar aún hoy en día...me pregunto. Habrá un oído dispuesto a ser seducido por el don de la palabra. Sucumbirá una cabecita por una frase o un lirismo poético.
Aún hoy las palabras convocaran a esa fuerza creadora que es el amor. Qué poder tienen las palabras en esta sociedad actual, cuál es su poder de convencer, de enamorar, de seducir, de poner a rodar un caudal de pasión.
Los medios de comunicación han variado desde el viejo radioteatro: nos pasábamos horas soñando junto a la radio. Para los que no nacimos en ciudades grandes el radioteatro era cita obligada a media tarde, luego los más audaces o " fuertes" venían en la noche. Voces increíbles de hombres varoniles y galantes, voces femeninas dulces y algo sensuales, sólo algo que no era muy bueno que la heroína se mostrara muy sensual, y voces maléficas, nos detenían junto a la radio con otro montón de sonidos ilusorios y nos enamoraba de las voces. En esa misma época el teléfono, que era lento y peresozo, que era de disco y fijo, también nos posibilitadaba hablar con voces no muy lejanas pero, era la época de descubrir el sonido y enamorarse de ello.
Las impostaciones de voz para los actores eran una exigencia. Los sonidos habían ganado el espacio y parecía imposible que algo los sustituyera. Para quien acá escribe, le llegó la imagen televisiva a los 3 años, pero el cine ya era una meta para cualquier familia de clase media en los fines de semana y con sonidos incluídos.
Mi reflexión de hoy es sobre el sonido de las voces humanas, sobre lo enamorado o no que se puede estar de estas voces. Por algo sobreviven las voces románticas de la historia de la música, aunque claro, eso es agua de otra fuente.
Hoy, digitalizado gran parte de nuestro mundo, lleno de imágenes desde la calle hasta la avenida, desde el barrio hasta el centro, en este escenario donde todo es rápido y los sonidos se pierden en cada rincón por el exceso de ruidos permanentes, quiero rescatar el valor de las palabras.
Enamorarse del sonido de la voz humana.
Enamorarse del arrullo de una madre sobre la cuna.
Enamorarse de la primer frase de amor que le dice un chico de 11 años a una compañera de clase.
Enamorarse de la narración de cuentos que es: patrimonio de lo intangible. Que es recuperación de las voces tradicionales que nos acunaron antes de nacer, de lo europeo que nos legaron y lo americano que nos cobija, de lo uruguayo que nos late desde la entraña.
Enamorarse del sonido, nuevamente de la voz...sin imagen, sin aparato de por medio...nada puede remplazar la voz humana y la calidez de una mirada.
Enamorarse es eso: dar por sentado que aunque todo se invente nada puede remplazar el objeto de nuestro amor.
Así estoy de enamorada de contar cuentos y leer en cualquier espacio donde halla oídos que necesitan o quieran escuchar.

domingo, 12 de octubre de 2008

Imágenes, imágenes, imágenes...

Cuánto poder encierra una imagen, qué amalgama de simbolismos nos revela, cuántas lucecitas enciende en nuestro subconciente... Evidentemente de acuerdo a lo que hasta aquí hemos presentado ello es indudable, para muestra bastan los incontables ejemplos que hemos ido consignando a lo largo y ancho de este blog. Pero a fuerza de ser sinceros para tener una idea cabal de lo que queremos expresar no podemos ser omisos con respecto a las imágenes literarias, menos evidentes tal vez pero con fuerza y vigor inusitadas. Para que comiencen a sumergirse en este fascinante mundo de las letras he aquí un puzzle de diversos temas y autores. Les invito a dejarse invadir por la honda ingravidez de la palabra para convertirla en imágenes tan vuestras como vuestra será su lectura e interpretación. Sugiero que leáis la obra original para que "las partes se relacionen con el todo"



...Ya no la quiero, es cierto, pero tal vez la quiero.
Es tan corto el amor, y es tan largo el olvido...
(Neruda, Poema Nº 20)

...porque tú siempre existes dondequiera
pero existes mejor donde te quiero
porque tu boca es sangre
y tienes frío
tengo que amarte amor
tengo que amarte...
(Benedetti, Corazón coraza)

Oh mar, enorme mar, corazón fiero
De ritmo desigual, corazón malo, ...
(Alfonsina Storni, Frente al mar)

Al olmo viejo, hendido por el rayo
y en su mitad podrido,
con las lluvias de abril y el sol de mayo
algunas hojas verdes le han salido...
. (Antonio Machado, A un olmo seco)

Tómame ahora que aún es temprano
y que llevo dalias nuevas en la mano.
Tómame ahora que aún es sombría
esta taciturna cabellera mía...(
Juana de Ibarbourou, La hora)


...El ciego sol, la sed y la fatiga.
Por la terrible estepa castellana,
al destierro con doce de los suyos
-polvo, sudor y hierro-, el Cid cabalga
...(Autor Anónimo,Cantar del Mío Cid)


En un lugar de la Mancha, de cuyo nombre no quiero acordarme, no ha mucho tiempo que vivía un hidalgo de los de lanza en astillero, adarga antigua, rocín flaco y galgo corredor. Una olla de algo más vaca que carnero, salpicón las más noches, duelos y quebrantos los sábados, lentejas los viernes, algún palomino de añadidura los domingos, consumían las tres partes de su hacienda. El resto della concluían sayo de velarte, calzas de velludo para las fiestas con sus pantuflos de lo mismo, los días de entre semana se honraba con su vellori de lo más fino... ( Miguel de Cervantes Saavedra,El ingenioso Hidalgo Don Quijote de la Mancha)


...Tenían en el planeta Marte, a orillas de un mar seco, una casa de columnas de cristal y todas las mañanas se podía ver a la señora K mientras comía la fruta dorada que brotaba de las paredes de cristal, o mientras limpiaba la casa con puñados de un polvo magnético que recogía la suciedad y luego se dispersaba en un viento cálido. A la tarde cuando el mar fósil yacía inmóvil y tibio, y las viñas se erguían tiesamente en los patios… (Ray Bradbury, Crónicas Marcianas)

viernes, 10 de octubre de 2008

¿Quiénes, qué, por qué...?


" Dos mujeres en el bar" de Pablo Picasso.
Qué estaban haciendo, me pregunto, o mejor aún: por qué bebían.
Por la ropas no era muy típico de la época que ellas bebieron libremente en un bar.
Serían prostitutas?
Si lo fueran...tendrían una vida. Una historia o muchas para contar.
Y sus nombres, sus amigos, sus familias...y todas sus penas.
Cuántas cosas convoca una imagen desde nuestro interno proceso de reconocimiento y apreciación.
Como en toda lectura veremos cosas diferentes. Cada cuál podrá imaginar o plasmar historias que se le ocurra desde donde ve la imagen.
Se animan a contar qué se imaginan...es un buen ejercicio para desarrollar la empatía o antipatía que sentimos con la imagen y además claro, para jugar a adivinar la verdadera historia jamás contada de una imagen, en este caso, famosa.

Puerta

Puerta
Enrique Medina