viernes, 18 de junio de 2010

CONMEMORACIÓN DEL 19 DE JUNIO

Siguiendo las instrucciones de mi colega bloguera voy a escribir algo sobre esta fecha memorable.

En realidad, el 19 de junio, hasta hace poco, fue para mí, una intensísima fuente de preocupaciones. Como coordinadora docente, tenía que preparar la Ceremonia de la Jura de la Bandera en conexión con Primaria y la Promesa del alumnado del primer año escolar. Los de sexto hablaban sobre el Natalicio de Artigas, y repetían una frase que aparecía-creo yo- en sus libros de texto, según la cual las últimas palabras de Artigas fueron: ¡”Mi caballo! ¡Tráiganme mi caballo”! Nunca estuve de acuerdo con hacer repetir esas frases que quién sabe si fueron dichas o no, pero los niños parecían fascinados con ellas y finalmente había que aceptarlas.

Yo tuve en el liceo Manuel Rosé de la ciudad de Las Piedras un extraordinario profesor de Historia Nacional y Americana. Fue uno de los que más contribuyó para convertirme en una lectora crítica. Su sabiduría no era puramente histórica sino de la vida y sus circunstancias. Si el tema era Artigas, lo único que nos faltaba era que el prócer abriera la puerta del salón, entrara a nuestra clase y nos saludara cordialmente, pero no con sus frases célebres sino con un fuerte apretón de manos. Todos escuchábamos al profesor con devoción, nadie faltaba a sus clases, porque además de ser imprescindibles para el conocimiento, eran de una atractiva amenidad “salpicada” de anécdotas.
En la cercanía de esta fecha y con el doloroso recuerdo del monumento a Artigas en la Plaza Independencia, vejado por una banda de inadaptados, me da una gran congoja recordar que según lo que habíamos aprendido en esas fabulosas clases, Artigas no había sido el artífice de nuestra independencia, tal cual se concretó más adelante, porque sus ideales se relacionaban con la federación y confederación de los pueblos libres, -entre ellos- la Banda Oriental. También me acongoja recordar que murió confinado en Paraguay entre paraguayos y guaraníes misioneros y no en su tierra natal a la cual no quiso volver.
Me gustaría recordarlo hoy, con el título que le dieron allá: Karai Guazú: Gran Señor. El mejor título después del que le dieron sus contemporáneos: Protector de los Pueblos Libres.

Elijo para conmemorar su recuerdo una canción del argentino Andrés Calamaro, cantada por el uruguayo Alfredo Zitarrosa: “Adagio a mi país”. Si la federación de los pueblos libres de Artigas no pudo ser realidad aún, al menos forjémosla nosotros. ¿Por qué no? ¿Verdad?
Aquí estamos en este blog también Malu y yo. Argentina y uruguaya, respectivamente, tratando de llevarles -de común acuerdo- comentarios para leer y pensar.
Transcribo la letra de “Adagio a mi país”-en otras versiones el título es: “Adagio en mi país”- porque tiene un innegable sentido relacionado con las circunstancias pasadas y las actuales.

En mi país, qué tristeza,
La pobreza y el rencor…
Dice mi padre que ya llegará
Desde el fondo del tiempo otro tiempo
Y me dice que el sol brillará
Sobre un pueblo que él sueña labrando
Su verde solar.
En mi país, que tristeza
La pobreza y el rencor.
Tú no pediste la guerra
Madre Tierra, yo lo sé.
Dice mi padre que un solo traidor
Puede con mil valientes,
El siente que el pueblo en su inmenso dolor
Hoy se niega a beber en la fuente clara
Del honor.
En mi país somos duros,
El futuro lo dirá.
Canta mi pueblo una canción de paz
Detrás de cada puerta está alerta mi pueblo
Y ya nadie podrá silenciar su canción
Y mañana también cantará.
En mi país qué tibieza
Cuando empieza a amanecer
Dice mi pueblo que puede leer
En su mano de obrero el destino
Y que no hay adivino ni rey
Que le pueda marcar el camino
Que va a recorrer.
En mi país, qué tibieza
Cuando empieza a amanecer.




1 comentario:

Sony dijo...

WOW! Querida Alfa, Magnífico trabajo! Cargado de historia paraguaya y nostalgia de tiempos pasados, en los cuales el idealismo social que era y sigue siendo expresado a traves del canto y la musica, ha logrado su cometido: hacer la revolucion intelectual, misma que ha hecho libre a muchos al manifestar su pena y sufrimiento causados por el nepotismo de gobiernos corruptos y dictatoriales que han llevado a los pueblos a la ignoracia, hambre y pobreza.
Indudablemente, este es un magnifico espacio para continuar luchando contra la desigualdad social no solo del Uruguay sino también de los paises hispanohablantes, además de contribuir al ejercicio de las letras apoyadas por la tecnología.
Saludos desde Florida, USA. Sonia.

Puerta

Puerta
Enrique Medina